Me encanta el océano y necesito estar cerca de él. Pero la verdad es que me aterroriza por completo. Es enorme, lleno de vida de la que no sé nada. Soy el tipo de persona que se siente atraída por las cosas que me asustan. Es emocionante sentirme incómoda y desafiarme a mí mismo para ver qué miedos puedo superar. Por lo tanto, decidí intentar superar mi miedo al océano nadando en él con el pez más grande del mar. Oh, sí, también resultan ser tiburones.
Encontré un lugar en México llamado Isla Holbox, que es un destino popular para hacer tour de tiburón ballena. Antes de que pudiera convencerme a mí mismo de no hacerlo, pedí salir del trabajo, reservé mi vuelo y pagué la excursión del tiburón ballena en cuestión de minutos (a veces soy bastante impulsiva) No hay vuelta atrás ahora.
Si pudieras mirar mi historial de Google una semana antes de irme, verías MUCHO de lo siguiente. ¿Los tiburones ballena se juntan con los tiburones blancos? ¿Los grandes tiburones blancos y los tiburones ballena nadando en las mismas áreas? ¿Alguna vez un tiburón ballena ha lastimado a un humano? ¿Incluso por accidente? Luego, me topé con una página de la clase de jardín de infantes donde un niño de 5 años dibujó una foto de un tiburón ballena y escribió sobre cuánto los amaba. Leí todo su post sobre lo dulce y gentiles que son, como elefantes del mar. Da la casualidad de que amaba a los elefantes y si este niño confía en los tiburones ballena, yo también lo haré. Ahora estaba realmente emocionada.
1, 2, 3, VAMONOS.
Es mi tercer día en Isla Holbox (que es un lugar muy chévere) y ha llegado el momento de enfrentarme a mis miedos. Me dan mi equipo de snorkel y subo al bote con otras 10 personas que también están de visita por la misma razón.
El viaje en bote es de aproximadamente 2 horas pero, afortunadamente, estoy demasiado preocupada porque me duele el estómago y no hay baño en el bote, como para preocuparme por lo que estoy a punto de hacer. Además, nunca antes había practicado snorkel y no tengo ni idea de cómo respirar a través del tubo. Estas son mis dos preocupaciones principales cuando comenzamos a entrar en aguas tranquilas y cristalinas sin tierra en el sitio.
Más adelante, vemos algunos otros barcos dando vueltas en un área determinada. Nos dirigimos en esa dirección, ya que aquí es donde deben estar los tiburones ballena. Nuestro instructor pregunta quién quiere ir primero. Mi mano sube, probablemente porque estoy desmayado por el miedo y no tengo idea de lo que estoy haciendo. Lo principal que nos dice es que nos aseguremos de no tocarlos y saltar cerca de su cabeza y luego nadar junto a ellos, siguiéndoles.
Está bien, pero ¿cómo respiro a través de esta máscara? Le digo que no sé cómo usar esto y él dice que estará a mi lado para ayudarme si lo necesito. Son dos a la vez, así que otra chica y yo nos emparejamos y nos sentamos en el costado del bote, esperando su señal.
Señala un tiburón ballena y dice que está bien, cuando cuento hasta 3, salta. ¿Qué? Esto está sucediendo demasiado rápido. «¡1, 2, 3, ya!» Saltamos y me encuentro inmediatamente agarrando su mano (espero que esto sea lo que él quiso decir con «aquí para ayudar») y meto la cabeza bajo el agua.
NADAR CON UN TIBURÓN BALLENA
Antes de este viaje, vi un video de esta niña nadando elegantemente junto a estas hermosas criaturas. Pensé, fácilmente voy a tener una oportunidad como esa. Avance rápido hasta el momento presente. Cuando pongo mi cabeza bajo el agua, la boca del tiburón ballena está aproximadamente a 1 pulgada debajo de mis pies. Mierda, necesito apartarme del camino. Menos mal que estoy sosteniendo la mano del guía. Me aleja un poco y luego nadamos junto a él durante unos 15 segundos antes de que desaparezca.
Bueno, el único video que obtuve allí fue un montón de conmoción de mí saltando al agua, viendo la cabeza del tiburón ballena y luego la cámara temblando sin tiburones en el lugar mientras trato de mantenerme lejos de él. Esto es bastante cómico si alguna vez tienes la oportunidad de verlo.
Nuestro turno ha terminado por ahora. Dejamos que todos los demás en el grupo se vayan y podemos ir de nuevo. Esta vez, no tomé la mano del guía (¡lo prometo!) Y de hecho pude nadar a su lado y seguirlo sin asustarme. Si bien todo sucedió bastante rápido, hubo unos momentos en los que simplemente estaba nadando bajo el agua, pensando wow. Estos tiburones ni siquiera se inmuta por nosotros. Simplemente continúan abriendo y cerrando sus bocas increíblemente grandes y nadando lentamente hacia adelante. Qué experiencia tan increíble que recomiendo 100%.
CONQUISTANDO MI MIEDO
Si bien no puedo decir que mi miedo al océano haya desaparecido por completo, también debo decir que no necesariamente quiero que así sea. La razón por la que amo el océano es porque me hace sentir pequeño. Me recuerda que lo que sea que tenga en mi cabeza o cualquier problema que enfrente actualmente, es del tamaño de una hormiga en comparación con el mundo que me rodea.
Es increíblemente especial. Creo que esta experiencia fortaleció aún más esa perspectiva. También me mostró cómo tenía tanto miedo de algo (un tiburón ballena) que en realidad ni siquiera se preocupa por mí o parece darse cuenta de que existo. Los tiburones ballena son súper dulces y perdí demasiado tiempo teniendo miedo de ellos.
¿No es esto cierto con tantos de nuestros miedos?
By Jill
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