Kitesurf en Isla Holbox

Si paseas por las playas de Holbox, durante ciertas épocas del año, es posible que puedas visualizar a lo lejos cometas de colores que se elevan sobre el mar. Si te acercas, verás que estas grandes cometas están siendo utilizadas por personas para practicar un deporte extremo llamado kitesurf.

El kitesurf es un deporte acuático de deslizamiento que consiste en el uso de una cometa de tracción que propulsa al deportista (kiter, kitesurfer o su castellanización, kitesurfista) con la propulsión del viento. La cometa cuenta con dos líneas exteriores que se unen a la barra, donde el deportista se aferra, y otras 2 o 3 líneas que pasan por el centro de la barra y se sujetan al cuerpo con un arnés y ayudan a que el kiter pueda deslizarse sobre el agua mediante una tabla o kiteboard.

Este deporte tiene varias modalidades: se puede navegar con olas, como se hace en el surf; el race que es una carrera entre boyas estilo slalom y el freestyle, donde se realizan diferentes ejercicios en el aire, saltos, rotaciones, etc.

El deporte del kitesurf es muy joven tal cual lo entendemos en la actualidad. Su origen rudimentario se encuentra en los siglos XII, XIII y XIV, cuando varias comunidades de pescadores y marineros de Indonesia, Polinesia y China utilizaban cometas para arrastrar sus embarcaciones durante sus labores de pesca. A principios de siglo XIX, el inventor británico George Pocock patentó un sistema de tracción con cometas para carros y embarcaciones. En 1970, el inglés Peter Powel inventó la cometa de 2 líneas y construyó una cometa en forma de delta con la que navegó en pequeños botes. Y en octubre de 1977, el inventor Gijsbertus Adrianus Panhuise, de los Países Bajos, logró la primera patente para el deporte. La patente describía un deporte en el cual se navegaba utilizando una tabla de surf tirada por una especie de «paracaídas»  que estaba unido por un arnés. Aunque esta patente no se explotó comercialmente, Gijsbertus Adrianus Panhuise se podría considerar como el primer kite-surfista.

El Kitesurf se ha difundido mucho en México debido a su gran extensión de costas. Hay múltiples lugares atractivos para este deporte como Puerto Vallarta, La Ventosa, Cancún y San Carlos, pero sin duda uno de los lugares más paradisíacos y apropiados para el Kite es Isla Holbox.

Esta isla se ubica en la parte más septentrional del estado de Quintana Roo, en la península de Yucatán, México. Holbox tiene múltiples factores importantes que hacen de este lugar un sitio perfecto para la práctica del kitesurf.

En primer lugar, la isla cuenta con una gran extensión de playas con aguas cálidas y poco profundas. Se puede caminar casi 50 metros hacia el interior del mar con el agua hasta la cintura, lo que favorce la práctica y la simple y rápida recuperaración del kiteboard.

El segundo factor importante es que el 75% del año hay viento apropiado para la actividad. Durante la temporada de noviembre a febrero hay vientos que provienen del Norte hacia el interior de la isla, por lo cual se puede practicar kite tranquilamente, sin alejarse demasiado de la costa. En esta temporada el viento es más fuerte (20 a 35 nudos), lo que genera que el mar tenga un poco de oleaje. Durante la temporada de marzo y abril, los vientos provienen del Este, Sudeste y Sur, por lo que son más cálidos, pero preservan velocidad (de 15 a 20 nudos). En la temporada de verano, es decir de mayo a julio, lo vientos son más constantes (con velocidades de 13 a 20 nudos) y los días tienden a ser soleados. En el caso de que el viento provenga del Sur, los kiters eligen una zona llamada Punta Mosquito donde el viento puede acercarlos a la costa.

Otro factor importante para los novatos en el deporte y para aquellos que desean seguir aprendiendo es que Holbox cuenta con escuelas de kitesurf, entrenadores certificados y todo el equipo necesario para la práctica.

Holbox no es un lugar recomendado sólo por los aspectos técnicos que conciernen a este deporte, sino también por un factor humano valorable que se genera en la comunidad del kitesurf del lugar. Es un sitio que despierta la solidaridad entre los deportistas y, según relatan los diferentes kiters, en Holbox es donde más seguros se sienten debido a dicha mirada constante de los demás. Es común encontrar destacados deportistas que pueden compartir opiniones y sugerencias con otros menos experimentados y el ambiente amigable y relajado de la isla facilita las relaciones interpersonales para pasar un tiempo agradable y enriquecedor. La experiencia del kitesurf, si bien es una sensación individual, es mejor cuando se comparte con gente interesante en un ambiente sano y natural.

Holbox representa en todo la esencia del Kitesurf, ya que es un lugar libre y pacífico donde los deportistas disfrutan de los constantes vientos y al mismo tiempo forman parte de una comunidad que los acoge y los hace sentir en familia.